Apulia, una pintoresca región junto al mar Adriático, se puede descubrir de forma eco-sostenible. Explora lugares hermosos y su naturaleza única. Aquí tienes 10 hoteles sostenibles en Apulia que no puedes dejar pasar.
Hoteles sostenibles en Apulia es sinónimo de alojamientos únicos, integrados en la naturaleza y comprometidos con el turismo responsable. Si estás planeando una escapada ecológica, esta región del sur de Italia te sorprenderá con trulli tradicionales, antiguas maserías y bioagriturismos que respetan el entorno.
También conocida como el “tacón de la bota italiana”, Apulia requiere tiempo para ser explorada debido a su forma alargada y su extensión. Sin duda, uno de sus mayores encantos son sus antiguas tradiciones: casas rurales rodeadas de olivos, catedrales barrocas y los famosos trullis.
Y no podemos olvidar el mar de Salento con sus playas paradisíacas, ni su antigua tradición culinaria, todo un emblema de la cultura apulense.
Hemos preparado una selección de alojamientos únicos en Apulia para que puedas planificar tu viaje sostenible. ¡Vive una experiencia 100% apulense!
1. Trulli di un’antica contrada

Un antiguo cortijo da forma a este precioso conjunto de trullis, restaurados recientemente siguiendo los principios de la arquitectura sostenible. ¿Alguna vez soñaste con dormir en un auténtico trullo? Este es el lugar perfecto.
2. B&B Masseria Uccio

Ubicada a solo tres kilómetros del mar Adriático, esta antigua masseria construida en piedra local es un fiel reflejo de la cultura tradicional de Apulia y Salento. Una estancia rural con mucho encanto.
3. Tenuta Flora Maria

Esta finca ecológica está integrada armoniosamente en el paisaje del campo salentino, rodeada de viñedos ondulantes y olivares centenarios. A pocos minutos de las playas de Porto Cesareo y la belleza barroca de Lecce, ofrece bicicletas gratuitas para explorar los alrededores y una amplia piscina rodeada de vegetación donde relajarse en total tranquilidad.
4. Residenza Gemma

Situada entre el mar y el verde de la campiña salentina, ofrece apartamentos ecológicos y una gran piscina con solárium. A solo cinco minutos a pie encontrarás las majestuosas playas de Porto Cesareo y Torre Lapillo.
5. Masseria Torricella

A tan solo 4 km de Alberobello, esta preciosa casa rural blanca te espera con habitaciones acogedoras rodeadas de naturaleza. Además, cuenta con piscina con jacuzzi y rutas ciclistas por los alrededores.
6. Bio-agroturismo Piccapane

Este alojamiento ecológico es ideal para descansar y descubrir el campo de Salento. Su ubicación es estratégica, a pocos kilómetros del mar y de los principales atractivos turísticos de la zona.
7. Lama di Luna

Una antigua masseria del siglo XVIII restaurada durante tres años con un meticuloso trabajo que respeta su historia y entorno. Cuenta con 190 hectáreas de paisaje natural donde se cultivan de forma ecológica viñedos, olivos y almendros.
8. Masseria Galatea

Una residencia que data de principios del siglo XX, rodeada del paisaje tranquilo de Salento. Se encuentra en Alessano, a solo 3 km del mar Adriático y cerca de destinos como Santa Maria di Leuca, Otranto y Gallipoli.
9. Casa Rural La Stornara

En pleno corazón de la Magna Grecia Tarantina, a 30 km de Matera y del Parque Nacional del Pollino, se alza esta casa rural ecológica reconvertida a partir de una antigua fábrica de tabaco de los años 40. Sus habitaciones con bóvedas de piedra y suelos de terracota evocan la elegancia rústica de Apulia. El jardín exterior, con olivos centenarios, naranjos y huerta ecológica, es un remanso de paz. Y muy cerca, una playa virgen y apta para mascotas espera en una reserva natural protegida.
10. Mater Torre Guaceto

Ubicada dentro de la Reserva Natural de Torre Guaceto, esta casa rural está rodeada de olivares centenarios y practica la permacultura. Promueve un turismo responsable y ofrece acceso cercano al mar cristalino de Salento.
¿Ya tienes ganas de visitar Apulia? ¿A qué esperas? Con estos preciosos alojamientos sostenibles, planear tu viaje será más fácil que nunca.
Imagen de portada: Foto de Juan Antonio Segal, vía Flickr